El Ministro del Interior, Jorge Larrañaga, en comunicación con FM GENTE, confirmó que en la mañana de este lunes se cumplió la resolución adoptada de expulsar a Adriano Sessa, organizador de una fiesta con 560 personas en Bahía del Pinar semanas atrás. Mònica Gonzaga y su hijo dejaron nuestro país luego de que el Ministerio del Interior resolviera cancelar la residencia temporal del joven.
Madre e hijos llegaron acompañados de un abogado al puerto de Montevideo para embarcarse en Buquebus con destino a Buenos Aires, adonde arribaron sin problemas y pasaron a alojarse en su casa en la capital argentina.
Adriano Sessa, el hijo de Mónica Gonzaga, fue acusado de organizar una fiesta clandestina en la residencia que su familia tiene en Bahía del Pinar, Uruguay, a la que habrían acudido unas 500 personas, violando las restricciones que establece el protocolo para las reuniones sociales en el país vecino.
La medida no alcanza a la actriz que igualmente decidió irse para acompañar a su hijo.
El ministro Larrañaga informó en FM GENTE que había dispuesto la presencia del Director Nacional de Migración en el puerto a los efectos de supervisar el cumplimiento de la medida dispuesta.
Como se recordará el pasado sábado 20 de marzo la Policía y personal de la Intendencia de Maldonado recibieron denuncias de una fiesta clandestina en la casa de Gonzaga en Bahía del Pinar.
La ex vedette desmintió la información y aseguró que el evento fue sobre la playa y los «invadieron personalidades uruguayas» que no estaban invitadas, el Ministerio del Interior del mencionado país decidió cancelar la residencia temporaria del joven, por lo que será expulsado del territorio.
La información divulgada establecía que estaban reunidas más de 500 personas en el predio, donde se incautaron diversos elementos de sonido, entre otros efectos.
Asimismo, la comuna notificó a Sessa de la infracción cometida por lo cual iba a recibir una multa. Trascendió que la misma habría quedado pendiente, ya que el abogado de Sessa haría los descargos del caso antes de quedar firme el pago de la multa aplicada.
«Cuando vino la policía en dos segundos desaparecieron todos por el bosque, por la playa, no quedó nadie. Mi hijo había estado una hora tratando de que no entraran por la casa de los vecinos, etc.», detalló en diálogo con Paulo Vilouta. Y añadió: «Después me enteré que había grandes, gente de 30, 40 años. Los chicos no supieron manejar la situación».
Paralelamente, el MSP abrió un expediente por el incumplimiento de las medidas sanitarias y cuyo trámite podría concluir con una multa millonaria para Sessa.
Foto: El Trecetv