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Delivery: ¿la propina digital le llega completa a los repartidores de PedidosYa?

El consumo a través de las apps de delivery creció a pasos agigantados desde que comenzó la pandemia y la cuarentena en la Argentina. «El delivery se duplicó», dicen desde PedidosYa.

Aprovechando esta circunstancia, y en vista de la difícil situación económica que vive el país, muchas personas se volcaron a los servicios de delivery: cuando comenzó la cuarentena, en marzo, eran cuatro –PedidosYa, Rappi, Glovo y Uber Eats– pero Glovo fue absorbido por PedidosYa y Uber Eats decidió cerrar la operación local a partir del 22 de noviembre.

«A partir del Aislamiento social, preventivo y obligatorio, y con el correr de las semanas se duplicó el número de repartidores que se registraron en la aplicación», señalan desde la colombiana Rappi. Una salida para la crisis para algunas personas, una solución para recibir la comida y los pedidos del supermercado para otras. Ambas empresas indicaron que tienen 20.000 repartidores activos (cada una). «Más de 20.000 repartidores realizaron la entrega de al menos un pedido en el último mes», expresaron específicamente desde Rappi.

Según la plataforma GlassDoor, un repartidor de PedidosYa en la Argentina puede ganar más de $ 31.701, con pagos adicionales promedio de $ 9.575 entre bonos adicionales por tiempo trabajado y otras variables. Es decir que el sueldo promedio mensual es de unos $ 40.000.

Mientras tanto, un delivery de Rappi tiene un sueldo base promedio de $ 25.316 con adicionales por unos $ 24.000. El sueldo promedio total, entonces, ronda los $ 50.000 por mes.

Entre esos adicionales mencionados hay que contar a la propina que dan los clientes a los repartidores. Desde siempre, y más desde la aparición de las apps de delivery, la propina se dan en la mano.

Pero, con el advenimiento de la pandemia, disponer todo el tiempo de efectivo en la billetera se volvió más complicado y los usuarios comenzaron a utilizar la opción de dar «propina digital» que incluyen las aplicaciones -Rappi desde el año pasado; Pedidosya sumó la feature hace un par de meses-.

Si bien las plataformas no dan números,  los cinco repartidores consultados reconocen que bajo la cantidad de dinero en efectivo que reciben por propina y aumentó la versión online.

La pregunta que surge, entonces, es: ¿la propina le llega completa a los repartidores? ¿O les realizan algún descuento sobre lo que reciben?

¿La propina va toda a los repartidores?

Si bien a comienzos de la cuarentena surgieron dudas al respecto, ambas empresas dicen que todo lo que se recibe en propinas va directo a los repartidores cuando se les realiza la liquidación, que en PedidosYa es semanal y en Rappi, quincenal. Y es una cuestión que refrendan todos los consultados, aunque algunos con matices.

Federico, de 30 años, es porteño y docente. Relata que el comenzó a trabajar en Rappi durante la cuarentena total cuando quedó desempleado. «A mí personalmente en su momento me ayudó muchísimo, me había quedado sin trabajo y me pude mantener gracias a los repartos, ahora que ya pude volver a dar clases baje la cantidad de días y horas que hago Rappi pero siempre sumó un poco como un extra», relata. El único gasto que le provoca el trabajo es el pago del monotributo.

Y agrega que la app le da un detalle de ganancias, con las propinas diferenciadas. «No las llevo mentalmente las cuentas pero puedo entrar a la app y buscar por día trabajado cuanto fue la ganancia de cada pedido», dice, y así se puede chequear en la captura de pantalla con el detalle que proporcionó, aunque hay que entrar a cada pedido para verlo. No hay descuentos extra, dice Federico.

Luca (29) trabaja en PedidosYa en CABA y sobre este tema cuenta: «De lunes a domingo lo que se genera lo vemos afectado en nuestra caja de ahorro los dias jueves y un dia antes en nuestro resumen». Reconoce que «hay activistas» que dicen que les dan un propocional de la propinas pero que él no lo ha chequeado. Lo único que le descuentan es el seguro.

El detalle de las propinas aparece aparte:

Jorge, de 42 años, es repartidor de PedidosYa en Quilmes. Señala que no le cierra el número de las propinas porque antes levantaba $ 600 y ahora paso a ser $ 200 en mano y menos de $ 100 online. En este sentido, hay que remarcar algo que tiene que ver con la usabilidad de las aplicaciones y que puede influenciar en estos números: mientras que Rappi la propina de $ 30 viene por default y es el usuario el que tiene que desactivarla o cambiar el monto hacia arriba o hacia abajo, en PedidosYa el cliente la propina viene desactivada y hay que agregarla manualmente (la primera opción es de $25 y las cifras no pueden cambiarse). Si bien no hay números que lo aseguren, por lo expuesto es factible asumir que aquellos que piden por Rappi dejan más propinas que los de PedidosYa.

Alejandro tiene 18 años. Relata que empezó en Glovo y luego de que esta dejara el pais, fue transferido a PedidosYa. La mayoría de las propinas, dice, se la dan en la mano. Cuando eran digitales, en Glovo tenia que esperar hasta final de quincena para cobrar y le aparecía lo que decía la app. En el caso de PedidosYa, no hay una notificación per se sino que el repartidor tiene que entrar a ver el detalle en el Historial de pedidos. «La verdad me parece mejor el de PedidosYa que Glovo, ya que tenes la posibilidad de ver las propinas al finalizar el pedido.»

Los testimonios responden la pregunta del inicio: sí, todo el dinero de las propinas van para los repartidores que, sin embargo, prefieren recibir el dinero en la mano. 

De dónde viene la costumbre de dejar propina

La palabra propina viene del griego: su origen surge de la acción «beber», que es «pino» en griego, y «pro», que significa «antes». Pero la costumbre de dejar un dinero extra tras una consumición se hunde en las raíces de la historia. La teoría más difundida es la de los aristócratas ingleses que le dejaban este pago extra a los empleados de la casa que los recibía, por transición debe haber viajado a los Estados Unidos y convertirse en el pago a esclavos. 

Este dinero, que suele darse en rubros como el gastronómico, la hotelería y algunos transportes (al menos en la Argentina), y que ronda el 10% de la compra -dicen los mozos más viejos-, ahora se trasladó directamente al ámbito virtual, más cuando se piensa en el crecimiento de los delivery tanto de alimentos como de otro tipo de productos.

 

Fuente: infotechnology