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FUTBOL FEMENINO

El valor de ser mujer

Se conmemora un nuevo 8 de marzo, que significado intrínseco toma la palabra Mujer en ese día, y cual es el lugar que ocupa en la agenda hoy. La palabra Mujer va más allá de su definición como distinción de género, su significado se ha ido resignificando como tantas mujeres hay en este mundo. Son las propias mujeres en la búsqueda de encontrar su definición y significado, que se fueron construyendo a lo largo de la historia.

El rol de la mujer fue cambiando con el paso de los años, por su afán de ser reconocida y ocupar espacios que eran solo para los hombres, por la concepción de un mundo injusto para este género. Largo es este camino que aún no culmina, sino que se transita día a día cada una de las mujeres que aporta a este mundo desde el lugar que ocupa.

Mujer hoy significa asumir un compromiso propio, de cada una, de todas y de los varones que componen una comunidad, porque si no es juntos, no se logran los objetivos planteados, ni las metas, ni se adquieren derechos, ni se promulgan leyes, ni se llegan a acuerdos.

Este día tiene que ser de fiesta pero también de compromiso, de lucha, de entrega y de reivindicar todo aquello que está lejos de ser alcanzado.

Darle un sentido más grande que la propia palabra, que ha tomado otras formas y otras definiciones, hacer una revisión de los roles que se ocupan y si desde ese lugar se logra que tome un valor y un significado preponderante la palabra Mujer.

Cualquier sea el papel que se ocupa siempre se puede educar, enseñar, aprender, intercambiar y lograr cambios significativos en los otros y en uno mismo, pequeños o grandes cambios, diarios, que son de aporte para toda la sociedad.

Siempre las mujeres han mejorado el mundo con sus aportes y sus logros, eso es un hecho innegable, por más que a veces se trate de ocultar, al final todo sale a la luz, y una mujer fue protagonista de un evento importante que modificó el mundo para siempre.

Hoy se debe poner en debate las metas que siguen sin ser alcanzadas, los derechos que aún no se logran, los acuerdos y las leyes que faltan. Poner en agenda no solo este día, sino cada día, en cada espacio que se ocupa, no ser solo la noticia del día, por un día que fue asignado.

Lograr discutir el porque no se logra que una mujer hoy gane lo mismo que un hombre en el mismo puesto de trabajo, porque no existen más puestos de dirección o gerenciales ocupados por mujeres preparadas y valiosas. Porque no se llega a la cuota en el parlamento, porque los sindicatos la mayoría están dirigidos por hombres, que existan carreras universitarias donde la matrícula o sus egresos sean en menor proporción mujeres, y lo más importante, porque una ley de género ya promulgada, no tiene presupuesto, cuando es para proteger aquellas mujeres vulneradas en sus derechos.

El 8 de marzo no es una lucha de géneros, ni de ideas, ni de rivalidad entre hombres y mujeres, ni entre las propias mujeres, es una lucha en común, en sociedad, juntos, por lograr equidad, igualdad, libertad, por construir un mundo mejor, en el que todos son parte, pero en donde las mujeres quedan relegadas a esperar su turno.

 

Lic. Alejandra Cardoso.  (Columnista invitada de 365DM=