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Bella Vista de Paysandú en la cúspide de la OFI, campeón Liga Mayor 1998

COPA LIGA MAYOR DE LA OFI EN MUSEO CHACARERO para Diario Uruguay.

 

Como viene ocurriendo en cada capítulo que publicamos, «Los hitos del fútbol chacarero» siguen apareciendo en cada página del Museo Chacarero, con aquellos deportistas que se han encaramado en los primeros planos de la Organización del Fútbol del Interior. Gracias a la colaboración diaria de aportes documentales de periodistas de otras épocas de Paysandú. El boom que significó para los sanduceros la Copa de Clubes Liga Mayor de la OFI, lo fue para los bellavistenses que pasaron un examen difícil al ganarle al casi invencible Punta del Este, con todo lo que ello suponía por aquellos años.

Lo de Bella Vista y su Liga Mayor lograda necesita una explicación. Primero individual, después colectiva. Qué mejor que leer el comentario al final del partido en la mejor revista deportiva del interior de Uruguay, que lo vivió y lo sintió mucho más cerca que todos nosotros:
Los hombres del campeón: Gustavo Rotundo, Pablo Friedrich, Angel Betti (capitán), Ricardo Murieda, Pierino Lancieri, Eduardo Ugarte, Eduardo Rotundo, Marcelo Delgado, Alcides Bandera, Julio Merentiel, Willington Vallejo, Pablo Vega, Sergio Mascazini, Juan Arregín, Egidio Arévalo Ríos, Ruben Bidondo, Ricardo Bandera, Ruben Cejas, Ramón de los Angeles (DT), Profesor Ruben Cunha (PF), Ruben Calabuig (ayudante de campo) Oscar Menta (fisioterapeuta), Adolfo Michelli (equipier), Ramón Silva (kinesiólogo), Ruben Nuñez (2º ayudante), José Díaz (entrenador de goleros), Dr. Juan Mojoli, Dr Elbio Cardozo (médicos) y Carlos de los Angeles (delegado).

 

BELLA VISTA CUMPLIÓ OTRO SUEÑO: CAMPEÓN DE LA LIGA MAYOR DE OFI «REPÚBLICA DEL PERÚ»

Cuando el silbato del árbitro Josefino Cono Ostojich ordenó el comienzo de la segunda final de la Liga Mayor, el corazón de las cerca de 7.000 personas que se dieron cita en el coloso de cemento, comenzó a palpitar de forma acelerada , es que la inmensa mayoría alentaba la esperanza auriblanca sanducera de quedarse ya luego del confronte, con la ansiada meta soñada por la gente «papal», el título que lo catalogará como el mejor en este primer campeonato, denominado Liga Mayor del fútbol del interior.

Pero a su frente estaba el linajudo Punta del Este, encabezado por el excelente meta Francisco Cabrera y el coraje del sanducero «Lechuga» Ferreira, y a pesar de que Bella Vista bajó al campo de juego con un planteo ofensivo, buscando ya en las primeras de cambio alzarse con la victoria, los del este capearon el primer temporal y a los 32 minutos en una desafortunada jugada G. Rotundo vencía la valla de su hermano Eduardo y un frío presagio recorrió el estadio pensando tal vez en aquella final del interior, cuando luego de perder en su casa, los esteños nos vapulearon en nuestro propio estadio.

Pero la historia no se repitió porque el Bella Vista de Ramón volvió a demostrar su indeclinable fervor, ganas y amor propio y sin jugar ni medianamente bien, con el coraje de sus hombres y el ensordecedor aliento de «su» tribuna y merced a dos jugadas fundamentales dio vuelta el resultado y se consagró merecidamente y con letras grandes «CAMPEÓN». Decíamos dos jugadas fundamentales, minutos antes del empate bellavistense una monumental tapada del «Flaco» Rotundo a los pies de Tejera y luego (amén de la  expulsión de Márques y la sustitución de Silva) el penal claro pero en jugada fortuita que el «Cola» Merentiel transformará en el gol del empate y la tranquilidad. Lo que sucedió después entra en el terreno de los recuerdos, el gol definitivo de W. Vallejo, el pitazo final y la locura de todo un pueblo que acompañó a Bella Vista más allá de divisas y que vibró como hace tiempo no lo hacía, es que el fútbol sanducero gracias a los bravos «papales» volvía a estar en la cumbre del fútbol del interior, tal vez presagiando un nuevo Litoral.

Más que un saludo a los Bellavistenses por la hermosa conquista, «Todo Deportes» felicita al fútbol y al pueblo deportivo sanducero por el nuevo lauro obtenido.