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Fútbol Uruguayo

Luis Suárez: «Nunca me faltó un plato de comida, pero fue algo complicado”

HECHALACELESTE. Bolívar Lacuesta para FUTBOLURUGUAYO.UY|21.04.2015|20:22:00
Aunque ahora Luis Suárez es uno de los futbolistas con más reputación del mundo y de los que más gana dinero mensualmente y vive a cuerpo de rey en Barcelona, el pasado del uruguayo no fue color de rosa. Y él, pese a la fama y popularidad de la que goza al ser una de las figuras del equipo catalán, no tiene pena en recordar todas las vicisitudes y adversidades que tuvo que superar en su país cuando solamente era un niño.

suarez de chico en nacionalEl atacante de los ‘azulgranas’, quien viene de ser figura por sus dos goles en la victoria 1-3 de Barcelona sobre PSG en la Champions League, el miércoles pasado, tuvo una conversación sincera con el Canal 10, de Uruguay.

Con 11, 12 0 13 años me iba a cuidar carros con mi abuelo para tratar de llevar algo de plata a mi casa. Mi madre no me dejaba, pero le mentía diciendo que iba a casa de un amigo o algo así. Nunca me faltó un plato de comida, pero fue algo complicado”, confesó de entrada el ‘Pistolero’.

Suárez siguió relatando detalles de su niñez: “Con 10 años, mi madre trabajaba en un almacén y yo iba a buscar la propina que le dejaban y, mientras mi padre o un hermano cocinaba, yo me iba a hacer compras. Esas cosas me hacen recordar el sacrificio que hice para poder jugar fútbol. Por eso, ahora lo valoro todo mucho más”, agregó en su relato.

El goleador también reconoció que desde que era un infante se caracterizaba por ser inquieto e incluso indisciplinado en su etapa de colegio. “En el colegio no tenía una buena conducta. No estaba nunca quieto. Recuerdo que en cuarto grado mi mamá me daba una libreta para que la maestra escribiese allí cómo me portaba”.

El uruguayo Luis Suárez, que tuvo una sanción por morder a un rival en el Mundial de Brasil, no se avergüenza de su historia de lucha, sudor y lágrimas durante su niñez. Quizá por eso, en cada partido entrega todo, no da nunca un balón por perdido y, con esos argumentos propios de su naturaleza y formación desde niño, va camino a convertirse en figura de un Barcelona cargado de estrellas y ‘cracs’.

 

Fuente: El Tiempo