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FIFAGATE: «la mecánica del FIFAgate era la siguiente: el dinero entraba en la cuenta (Conmebol), y luego el presidente, Leoz, lo repartía a su antojo.

CASO FIFAGATE| Desde Redacción | FUTBOLURUGUAYO.UY|02.07.2015|09:11:00.
Decidió hablar después de 11 años. «Era el momento de contar mi historia y liberarme de esta carga con la que he vivido tanto tiempo”, dice. Le dieron confianza la Fiscalía de Estados Unidos y el FBI. Vive en España. El diario AS le puso el nombre de Confidente X, el hombre que trabaja en la Conmebol y que ahora hace reveladoras declaraciones sobre la corrupción en el máximo ente del fútbol regional.
Desde el 19 de este mes, el diario español AS publica informes de FIFAgate, con declaraciones y documentos que denuncian las coimas que se repartieron los dirigentes de la confederación sudamericana.
Confidente X viene a ser como el garganta profunda, el hombre que informó a periodistas del diario The Washington Post, sobre la participación del presidente norteamericano Richard Nixon en el escándalo de Watergate que provocó su dimisión en 1974.

Quiere proteger su identidad porque «el doctor (Nicolás) Leoz (expresidente de la Conmebol) es ya muy mayor, pero hay otros que han estado cerca de él que son peligrosos”, asegura el ‘Confidente X’, descrito por AS como un hombre de mediana edad, ni alto ni bajo. Habla con seguridad y mantiene en su cabeza los números de cuenta, las fechas, los momentos. Entre sus revelaciones, el informante incluye al boliviano Rómer Osuna.
«Me dieron un millón en efectivo, en dólares, y una lista con iniciales y cifras. Me fui al hotel Yacht&Golf Club de Asunción y, como me habían ordenado, empecé a hacer el reparto del dinero entre los miembros que en esa época comandaban la Conmebol. Le entregué dinero a Julio Grondona, (Rafael) Esquivel, (Rómer) Osuna, (Eduardo) De Luca… Llamaba a la puerta de su habitación y les entregaba el sobre que previamente había preparado con la cantidad que cada uno tenía asignada. Algunos lo contaban y otros ni siquiera eso. Ni me miraban a los ojos. Cerraban la puerta y yo iba camino del siguiente cuarto, siguiendo el orden establecido en la lista. No todos cobraban lo mismo. Había sobornos más gruesos y otros de menos dólares”, dijo X a AS, que publicó el párrafo en su segundo informe del FIFAgate.
En el primer capítulo, el periodista Joaquín Maroto explica que «la mecánica del FIFAgate era la siguiente: el dinero entraba en la cuenta de la Confederación Sudamericana (Conmebol), y luego el presidente, Nicolás Leoz, lo repartía a su antojo. Movió cifras millonarias de las cuentas de la institución a las suyas personales. Así de fácil, así de impune.
El informe de AS «aporta documentos que prueban el saqueo al que fue sometida la Confederación Sudamericana de Fútbol bajo el mandato de Leoz (1986-2013). Nicolás Leoz Almirón (Pirizal, 1928) fue también miembro del ejecutivo de la FIFA (1998-2013) y vicepresidente de este organismo. Actualmente está en arresto domiciliario en su hacienda de Luque (Asunción) a la espera de ser extraditado a Estados Unidos, país que le acusa de corrupción, soborno, fraude, blanqueo y asociación para delinquir. Sus cuentas corrientes se confundían con las de la confederación sudamericana. Los traspasos de dinero eran frecuentes, tanto en dólares como en guaraníes”.
El relato del testigo, que trabajó en la Conmebol durante una década y media, describe el «modus operandi” en la confederación, «el epicentro de la corrupción junto con la Concacaf (Norteamérica, Centroamérica y Caribe), con dinero que llegaba desde cualquier parte del mundo, de Tokio a Nueva York, y, tras pasar por aquí y allá, acababa en cuentas de sus dirigentes en Paraguay, Brasil, EEUU o en Panamá. A veces, para maquillar las operaciones, usaban como testaferros a alguno de sus familiares. Leoz a su esposa, María Clemencia; sus ayudantes hacían algo parecido”.
En la parte tres del informe, X asegura que los dirigentes del fútbol sudamericano «maquillaban” sus coimas al «comprar casa, coches y fincas”.
«Incluso barrios casi enteros, como el de Villa Morra, muy cerca de Herrera, donde ahora está en arresto domiciliario a la espera de su extradición a Estados Unidos”,
dice.
Según Confidente X, gracias al fútbol, Leoz posee casi medio centenar de propiedades en Paraguay y millones en sus cuentas y su secretaria, una flota de 14 automóviles.
«Irmina es una persona clave en el entramado de la Conmebol. Secretaria personal de Leoz, además de su flota de automóviles vivía en una de las mejores casas de Asunción, un palacio inmenso, más grande que el que más te puede impresionar en Europa” dice el Confidente X, que recuerda que «era un casoplón de los más admirados en Asunción”.

El presidente de la Conmebol, Napout, no quiere aparecer
El actual presidente de la Conmebol, el paraguayo Juan Ángel Napout, no quiere aparecer y aún no se ha manifestado sobre lo que sucedió en la institución que preside. Así se lo explica a AS uno de los periodistas del diario ABC Color de Paraguay.
«Ni siquiera se le vio en el primer partido de la Copa América, la competición por excelencia del continente sudamericano”. Napout sí estuvo en Zúrich a finales de mayo, cuando el FBI y la Policía de Suiza detuvieron a ocho dirigentes de la FIFA en una redada en el hotel Baur au Lac.
Tras los sucesos pidió a las 10 federaciones sudamericanas que votaran en bloque al príncipe Ali y en contra de Blatter, pero Bolivia, Brasil y Ecuador se saltaron el acuerdo.
Napout habló el 29 de mayo sobre ello: «Dijimos que íbamos a votar en bloque. Pero algunos países decidieron no hacerlo. Lo entiendo. Son circunstancias excepcionales”. El actual presidente de la Conmebol, que se hizo a la sombra de Nicolás Leoz, lanzó un alegato tras las detenciones de sus compañeros en la FIFA: «La FIFA no puede ser corrupta. Si hay corrupción, es individual”. (AS)
fuente: http://www.paginasiete.bo/