Ahora me voy a referir al título, si cambió o no cambió el reglamento del fútbol. Grandes profesores que tuve como los Sres. Rodolfo Llanes, Francisco Pardiñas, Ramón Barreto, Juan Daniel Cardellino, Juan José Fortunatto, nos dijeron siempre para agilizar el partido y darle continuidad, «cuando un jugador comete una falta y le corresponde una tarjeta amarilla, NO es necesario, detener el juego». Para que el árbitro anote, lo debemos hacer luego recordando quién fue el infractor en un momento de que se para el juego, y al parar el juego para amonestar y anotar, a quién favorecemos: AL INFRACTOR.
Otra cosa: cuando a un equipo le comenten falta, hay dos opciones, velocidad o distancia, que la solicita quien va a ejecutar, NO existe en ninguna parte, que el árbitro le indique el silbato cuando el jugador quiere ejecutar en forma rápida.
Todo esto lo vi ayer, y me extraña de un árbitro FIFA, como Cristián Ferreira, que de tonto no tiene nada. Demoraba en cada oportunidad que les indiqué anteriormente, lo peor es que en el momento de adicionar sólo adicionó cuatro minutos (4’) .